Los préstamos son una operación financiera en la que una institución o persona auxilia monetariamente a otra, por medio de proporcionar dinero a quien realice el trámite para que después lo regrese con un interés acordado entre ambas partes. Los préstamos se dividen de acuerdo con su función y características:
- Personales
- Se hace a personas físicas.
- Se establece un plazo corto o mediano para que el prestatario devuelva el dinero.
- No es necesario que el cliente explique el porqué del préstamo.
- El prestamista puede pedir a otra persona (aval) que pague la deuda en caso de que el cliente principal no pueda.
- Tiene los intereses más elevados en comparación con los otros préstamos.
- La cantidad a prestar depende de los ingresos del prestatario.
- Se suele valorar el historial crediticio del cliente.
- Hipotecarios
- Préstamos a personas físicas para que adquieran una casa.
- Se paga a largo plazo.
- El espacio que se adquiere queda como garantía, en caso de que el préstamo no sea pagado.
- La cantidad a prestar depende de los ingresos del prestatario.
- Las condiciones del préstamo varían de acuerdo con las características del inmueble (vivienda familiar, segunda residencia, etc.).
- Hipotecarios UVA (Unidad de Valor Adquisitivo)
- Tienen las mismas bases que los préstamos hipotecarios normales, lo único que cambia es la tasa de interés, la cual sube o baja dependiendo de la inflación.
- Prendarios
- Están destinados a negocios o empresas para que puedan conseguir algún bien que necesiten.
- Su plazo de pago es a corto o mediano plazo.
- Los bienes comprados son la garantía del prestamista.
- Acuerdo en descubierto
- Son para los titulares de cuentas corrientes.
- Cuentan con un plazo muy corto para pagarlo (máximo 30 días).
- La cantidad a prestar depende de los ingresos del prestatario.
- Se suele valorar el historial crediticio del cliente.
- Su tasa de interés es de las más elevadas.
Conocer los tipos de préstamos que existen te ayudará a saber cuál es el ideal para ti, sin embargo, también es fundamental saber qué factores debes analizar antes de decidir, ya que tendrá una repercusión en tu situación financiera a corto, mediano o largo plazo. Así que estos son los puntos a considerar:
¿Tienes deudas anteriores?
Recuerda que en muchos lugares se revisa el historial crediticio de las personas y cuando este arroja que se tienen muchas deudas o que no se ha realizado un pago, lo más probable es que no se dé el préstamo, por lo que lo mejor es que procures tener un expediente limpio o que se muestre que realizas los pagos con normalidad.
¿Cuáles son tus gastos fijos?
Para la mayoría de los préstamos se prevé que se paguen con un porcentaje del sueldo de prestatario, por lo que tus pagos fijos (luz, agua, internet, etc.) se deben cubrir con la mitad de tu salario o menos, para que la posibilidad de pagar lo solicitado sea más factible.
¿Tienes algún activo?
Los activos financieros son un documento o título emitido por una empresa, banco o institución que permite a la persona tener un ingreso futuro por parte del vendedor.
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*Los préstamos están sujetos a aprobación.
Fuentes consultadas:
- https://economipedia.com/definiciones/prestamo.html
- https://www.cuentassanas.com.ar/mis-cuentas/mi-banco/conseguir-un-prestamo-bancario/tipos-de-prestamos-bancarios
- https://www.cmfchile.cl/educa/621/w3-article-27364.html
- https://www.finanzaspracticas.com.co/planificar/credito/tipos-de-credito
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